Según la Encuesta de Seguridad, desde 2013 que los ilícitos no disminuían. El año pasado cayeron en un 2,6%, es decir, hubo 130 mil hogares menos en que alguno de sus habitantes sufrió un delito. No obstante, el estudio reflejó baja en las denuncias.

Fue el propio Presidente Sebastián Piñera quien este martes entregó los resultados de la Encuesta Nacional Urbana de Seguridad Ciudadana (Enusc) 2018. Flaqueado por los jefes de Carabineros y la PDI, general Mario Rozas y Héctor Espinosa, el Mandatario destacó la baja de los delitos que afectaron a la población en los últimos 12 meses.

De acuerdo a los resultados de la Enusc, encuesta que mide los índices de delincuencia en todo el país, en un 25,4% de los hogares, al menos uno de sus miembros fue víctima de un delito, lo que presenta una disminución de 2,6 puntos porcentuales,en comparación con 2017. Es decir, los habitantes de 130 mil hogares menos fueron víctimas de delitos. Este porcentaje de victimización del año pasado no es el más bajo, de al menos los últimos seis años. En 2012, el porcentaje de víctimas fue de un 24,3%; en 2013, 22,8%, y en 2014, 23,5%.

El Presidente Piñera explicó que en la encuesta más valorada por los expertos en el tema de seguridad, ya que se entrevista a más de 27 mil viviendas en territorio urbano. Según su ficha técnica, su representación es de 13 millones de personas.

Otro tema destacado por el gobierno fue la baja en la sensación de inseguridad. Fue el 2015 cuando se registró el peak de este índice: un 86,8% de los encuestados dijo que tenía la sensación de que la delincuencia había aumentado.

Esa cifra bajó en 2016, en 2017 y el año pasado llegó al 76,8% de los consultados.

Desde el Ejecutivo atribuyen que la disminución de la victimización y de la percepción de la delincuencia responden a medidas más enfocadas en la prevención aplicadas por Carabineros y la PDI, como las rondas preventivas y la modernización de ambas policías.

En la presentación, Piñera dijo que para lograr bajas aún mayores son “fundamentales” los proyectos de control preventivo de identidad a menores, la ley “antiportonazos” y la modificación al control de armas, todas iniciativas del gobierno que están en el Congreso.

En tanto, el senador de la Comisión de Seguridad Ciudadana, Felipe Harboe (PPD), señaló que “esto es septiembre 2017 a septiembre 2018, siete meses de Michelle Bachelet y seis meses de Sebastián Piñera (…). Quedan cosas que hacer. La gente sigue viviendo con miedo”.

Bajan denuncias

A pesar de la satisfacción por los resultados obtenidos en la victimización y la percepción de la delincuencia, hubo una cifra que despertó preocupación: el número de denuncias.

Al universo que dijo haber sido víctima de un delito se le preguntó: ¿Usted o alguien denunció el delito? El 35,1% de los encuestados dijo que sí, lo que es significativamente menor a los cuatro años anteriores.

Respecto de 2017, se registró una baja en las denuncias de un 3,4 %, sin embargo, la baja más significativa es en comparación con 2015, año en que un 43,5% de los encuestados dijo que denunció el delito que lo afectó.

La subsecretaria de Prevención del Delito, Katherine Martorell, dijo que esta cifra “es preocupante” e hizo un llamado a denunciar. “Este es un indicador clave para elaborar políticas públicas de prevención de los ilícitos”, dijo Martorell agregando que “llaman la atención los motivos que se tuvieron para no denunciar”.

Al respecto, entre los principales motivos para no realizar la denuncia, un 18,8% dijo que “la policía no podría haber hecho nada”. Las otras principales razones fueron: “La pérdida no fue lo suficientemente seria”, “la policía no hubiera hecho nada”, “porque el trámite demanda mucho tiempo” y “la justicia (tribunales) no hubiera hecho nada”.

Noticieros en TV

Otro de los tópicos que midió la Enusc fue cuál fue la fuente de información de las personas para formarse una percepción de la delincuencia. Allí, el 50,2% de los encuestados dijo que era a través de las noticias en televisión, el 13,8% por otras personas y el 12,5, por experiencia personal.

Otra de las mediciones que se hicieron fue la percepción de violencia en el barrio, es decir, gente que declaró que en la zona en que vive ocurrieron hechos de violencia.

En este ítem lo que más se repite es la venta de drogas, aunque en un punto; escuchar balaceras o disparos, cifra que se mantuvo en relación a 2017, y el vandalismo, en que hubo una disminución de 1,1 punto porcentual.

En cuanto a incivilidades, aumentó el consumo de alcohol y droga en la vía pública.

En la baja la victimización “no es fácil, nunca ha sido fácil y no va a ser fácil, pero es bueno destacar que estamos empezando a ver los frutos de ese esfuerzo, estamos empezando a encontrar resultados”.

 

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